Bienvenido al Foro de Hormigas

Al registrarte, podrás resolver tus dudas, compartir tus diarios de cría y conectar con cientos de aficionados a la mirmecología.

¡Regístrate Ahora!

Mi diario de novato con hormigas: de la emoción a la paciencia

AntLover

Nexus
Nexus
Registrado
22 Ago 2025
Mensajes
4
Hola a todos, abro este tema como un diario personal que quizá pueda servir de guía para otros que estén empezando en este apasionante hobby. No soy experto, apenas llevo unos meses, pero me hubiera gustado leer algo así cuando comencé.

Día 1 – La compra y los nervios​

Después de leer un montón de foros y ver vídeos en YouTube, me decidí a comprar mi primera colonia de Lasius niger con reina y unas 15 obreras. El paquete llegó en un tubo de ensayo con agua, algodón y las hormigas en perfecto estado. La primera sensación fue de emoción… y también de miedo. Me preguntaba: “¿Y si las mato sin querer? ¿Y si hago algo mal?”.

Semana 1 – La paciencia es la clave​

Mi error inicial fue querer forzar a las hormigas a mudarse rápido a un hormiguero acrílico que ya tenía preparado. No lo hicieron, claro. Después entendí que el tubo de ensayo es el mejor lugar para ellas al inicio: oscuro, húmedo y seguro. Aprendí que la paciencia es el mayor aliado del cuidador de hormigas.

Semana 2 – La primera alimentación​

Puse una microgota de aguamiel en la zona de forrajeo. Al principio no hicieron caso, y pensé que no tenían hambre. Al día siguiente, descubrí a una obrera bebiendo, con el gáster hinchado. Fue una de esas pequeñas victorias que motivan a seguir. También les ofrecí un trozo de tenebrio (congelado previamente), y aunque tardaron en probarlo, finalmente lo aceptaron.

Semana 3 – Primeras dudas reales​

Noté que había humedad excesiva en el algodón del tubo y me preocupé por la aparición de moho. Pregunté en el foro y me recomendaron tener siempre un tubo de repuesto preparado para cuando toque mudanza. Otra lección: anticiparse a los problemas evita muchos sustos.

Mes 2 – La rutina del cuidado​

Ya entendí que no se trata de “hacer cosas todos los días”. Más bien es lo contrario: mirar poco, no molestarlas, ofrecer alimento una o dos veces por semana, y comprobar que tengan agua. Ahora disfruto observando cómo interactúan entre ellas. La reina sigue puesta en su rincón, las larvas crecen, y cada nueva obrera es motivo de alegría.

Conclusión de novato​

Si tuviera que resumir mis primeras semanas en tres consejos serían:
  1. No tengas prisa: las colonias necesitan tiempo para crecer.
  2. Sé constante: agua, proteína y azúcar en pequeñas dosis.
  3. Aprende observando: cada colonia es un mundo, y ninguna guía sustituye la experiencia propia.
Seguiré actualizando este diario con mis avances. Espero que sirva para animar a otros novatos a empezar sin miedo y con ilusión. Criar hormigas no es complicado, pero sí requiere respeto, paciencia y ganas de aprender.
 
Atrás
Arriba